El perfil incluye una variedad de SNP que se sabe que influyen en muchos aspectos de la salud, incluidos aquellos para:

• Sensibilidad a la insulina
• Salud ósea
• Riesgos de cáncer
• Salud cardiovascular
• Procesos de desintoxicación
• Fertilidad
• Función mitocondrial y metabolismo
• Metilación
• Equilibrio de neurotransmisores

La presencia o ausencia de SNP puede modificar el riesgo de enfermedad

¿Qué son los SNP?

Los SNP (polimorfismos de un solo nucleótido) son las mutaciones genéticas más simples. Son errores que provocan la sustitución de una única base por la original, como la citosina por timina. La mayoría de los SNP se encuentran en tramos de ADN que son regiones no codificantes. Cuando la sustitución cae en una región codificante, esa base puede requerir que se coloque un aminoácido diferente en la secuencia. La mayoría de estos no causan ningún problema. Sin embargo, relativamente pocos harán que la proteína resultante se pliegue incorrectamente, impidiendo así su función correcta.

La importancia de identificar los SNP

Con la llegada de los estudios genéticos individualizados y el análisis del “metaboloma” está surgiendo una era de medicina preventiva personalizada. Cuando se conocen los SNP, a menudo se puede determinar una “solución alternativa” metabólica, o aumentar las cantidades del sustrato de la enzima o cofactores (vitaminas y minerales) pueden mejorar la eficiencia de la propia enzima. En el ejemplo de MTHFR, se puede administrar al paciente una forma ya metilada de ácido fólico, metilfolato, para aumentar la eficiencia de las vías metabólicas afectadas. Los cambios en el estilo de vida en la ingesta nutricional y la evitación de la exposición tóxica también prometen evitar o retardar el desarrollo de enfermedades crónicas. El objetivo es utilizar el conocimiento de estas debilidades genéticas causadas por los SNP para prevenir el desarrollo de enfermedades

Instrucciones

Enjuáguese la boca con agua fría antes de recolectar la muestra.

Cada funda de papel contiene dos hisopos. Se deben recolectar cuatro hisopos en total.

Abra una de las fundas y extraiga un hisopo a la vez. Guarde las fundas de papel

para regresar los hisopos después de realizar la recolección.

Trague para eliminar el exceso de saliva. Con un movimiento circular, frote el hisopo

en el interior de una de las mejillas alrededor de 20 veces, ejerciendo presión

suficiente para empujar la mejilla.

Agite el hisopo con cuidado en el aire durante tres minutos para que se seque.

Coloque dicho hisopo en la funda y extraiga el segundo hisopo que se encuentra en

esta.

Repita los pasos 4 y 5 con la misma mejilla.

Abra la segunda funda y repita el mismo proceso con la otra mejilla para ambos

hisopos.

Guarde las dos fundas con los cuatro hisopos secos en el sobre de retorno para

hisopos de recolección y ciérrelo.